¿Dónde queda San Jacinto?

San Jacinto está en el Distrito de Nepeña, Provincia del Santa; en el departamento de Ancash

Somos aproximadamente 12,000 habitantes (año 2000).
Nuestra área
geográfica es de: 10 422.590 hectáreas.
El río Nepeña cruza el valle del mismo nombre. Tenemos también muchas LAGUNAS ARTIFICIALES construidas para regar los sembríos de caña de azúcar. Entre a este vínculo para observar fotografías.

COMO LLEGAR A SAN JACINTO?

Si partimos de Lima hay dos alternativas: Viajar a través de la Empresa de Transportes de Colores que va directo a San Jacinto o viajar a Chimbote en las diversas Empresas de transportes como l, y ya en Chimbote tomar el colectivo hacia San Jacinto.
Si es de Chimbote hay tres empresas de colectivos: La número 11, la 40 y la 2000. El primero ubicado entre las Avenidas Tumbes y Pardo y las otras dos en plena esquina, entre Pardo y Gálvez.
San Jacinto se encuentra a veintidós kilómetros de la Panamericana Norte, hacia el Este, y a la altura del Km 405.


martes, 31 de marzo de 2009

El Puma Celeste de Punkurí


Gracias a un convenio firmado por los ejecutivos de la empresa AgroIndustrias San Jacinto con la Universidad Nacional del Santa se está realizando el rescate de este patrimonio.
El arqueólogo Lorenzo Samaniego San Román se encarga de los trabajos para la puesta en valor del edificio piramidal donde se encuentra el felino. A pesar del tiempo trascurridos, la limpieza de esta imagen, está dejando al descubierto los niveles que corresponden a la cosmovisión de la época prehispánica.

El edificio está pintado como la mayoría del antiguo Perú. El cielo, en el mayor nivel, es azul y deja claro que el corpulento animal sube para cumplir con su papel de intermediario y producir la lluvia. Su noble cabeza y sus garras se incrustan entre los peldaños. La tierra, en el siguiente nivel, muestra los reflejos rojizos del atardecer hasta llegar al rosa en las curvas de la plataforma destinada a ceremonias sacras.
La cabeza del Puma Celeste, fue destrozada por los huaqueros ya que les inspiraba temor. Según Samaniego San Román, el Puma era negro con pupilas de color blanco, las fauces rosadas y en una laja que se puede ver debajo de su barbilla, interesantes indicios de cómo se llevaba la cuenta de los solsticios y equinoccios. Las patas estaban pintadas de verde con las garras de rojo y las uñas de blanco. El proyecto de restauración prevee su total recuperación con los pedazos que se han hallado.

1 comentario:

  1. ahh ps sera cuestión de ir a mochilear por esas tierras y vivir la emoción de legado de nuestros ancestros sigue publicnado que yo me jalo de cabeza por esos lares......XD

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